De la arquitectura a la artesanía del calzado. La historia de Aldanondo y Fdez
Aldanondo y Fdez empezó cuando dos arquitectos, Ignacio y Catuxa, cambiaron su profesión por la de maestros zapateros.

Catuxa Fernández e Ignacio Aldanondo decidieron darle un giro radical a su estudio de arquitectura, Losa Arquitectos, en 2012 pasando de la arquitectura a la artesanía del calzado.

Siendo zapateros, ellos mismos construirían sus propias creaciones con las manos, algo que todo arquitecto en algún momento de su carrera ha deseado. Todavía podrían conservar la mentalidad del diseño propia de su antigua profesión —el gusto por el croquis, la maqueta y el dibujo sobre plano—. Pero ahora, además, tendrían el placer del trabajo manual del artesano. Desde el boceto al patrón y al prototipo, pieza a pieza, puntada a puntada, hasta el objeto terminado.

Este cambio se emprendió con todo el respeto que merece la disciplina. Consecuentemente, se evitó tomar atajos que pueden llegar a afectar a la calidad. Los años 2012 a 2016 estuvieron dedicados al aprendizaje con dos veteranos artesanos de Barcelona: Josep Cunillera y Carlos Piñol. Con ellos, la formación fue eminentemente práctica y no se limitó, como suele ser habitual, al montaje del zapato sobre horma.

También incluyó el patronaje, el corte y el aparado —o cosido de las piezas del corte—. Muchos talleres externalizan estas disciplinas, pero, en este caso, lo que se pretendía era no tener que hacerlo, dominando la totalidad del proceso desde el diseño a la ejecución final. Todavía fueron necesarios unos meses más perfeccionando la técnica antes de estar preparados para presentarse como taller artesano en 2017.

El resultado que se persigue en la artesanía es el objeto final perfecto, pero con alma; algo que no se consigue con lo industrial. Para Aldanondo y Fdez —el taller de esos dos arquitectos convertidos en zapateros— la profesión artesana es un camino hacia la síntesis de destreza intelectual y corporal de la que hablaba Juhani Pallasmaa en su libro La mano que piensa.

TÉCNICA DEL CUERO

El aprendizaje consistió en dominar la técnica del zapato en cuero tradicional.

El chasis con sus refuerzos invisibles, contrafuerte y puntafuerte, es lo que distingue a un zapato artesano del hecho en fábrica. Es también lo que le da solidez junto con la pieza más tectónica: el cambrillón. Todas ellas son de cuero cortado y rebajado a mano con cuchilla, incluyendo la suela y el tacón por capas.

La artesanía del calzado es una de las disciplinas artesanas con más procesos. La mayoría de ellos se ejecuta con herramientas especializadas que es necesario dominar. Se usan estaquillados de madera para el tacón y suela. El lujado se realiza con hierros calientes. O la suela se cose a mano, entre otras operaciones que son necesarias. Cada diseño se patrona sobre la horma en el propio taller. Tras numerosos tanteos, resultan los cortes de cada modelo que se aparan con la máquina de coser.

IN MOTION

En agosto de 2017, se lanzó la tienda online y la primera colección titulada “En movimiento”.

Diseños con lengüetas o convertibles

Para librarse de las imposiciones de las temporadas, los elementos meramente funcionales como lengüetas o tirantillos tomaron protagonismo haciéndose intercambiables. Surgieron así modelos convertibles de zapato a sandalia o un cabrio descapotable.

Desde entonces, Aldanondo y Fdez se esfuerza por adaptar los procesos de la artesanía a la venta online. Los modelos de la web han sido testados y pensados para dar buen resultado en casi todo tipo de pie. Siempre se trabaja sin estocaje y bajo pedido, lo cual permite un alto grado de personalización. Cuando es necesario, al cliente se le envía material gráfico para que sea capaz de tomar sus propias medidas y comunicar sus preferencias.

La propuesta ha tenido repuesta entre un público internacional que valora la combinación de calidad y diseño. Los pedidos se han concentrado en lugares como Nueva York, Londres, Los Ángeles o Tokio. El comprador es algo más joven que el cliente habitual de zapato a medida.

En ocasiones, se trabaja con encargos para espacios de venta especializados que buscan un producto exclusivo. A estos clientes especiales, se les garantiza la exclusividad mediante pequeñas colecciones cápsula con detalles personalizados o sellos que la distingan.

Como coleccionistas de calzado y aficionados al diseño, ambos zapateros tienen un conocimiento amplio de la tradición de la indumentaria. A su vez, son conscientes del componente de moda aplicable en cada momento.

ARTESANÍA DEL CALZADO CONTEMPORÁNEA

AYF Laboratorio: la faceta más innovadora de Aldanondo y Fdez.

diseño con cuerdas

El zapato artesano de alta gama se asocia automáticamente con el diseño clásico masculino. Aldanondo y Fdez, sin embargo, apuesta por el diseño contemporáneo tanto para hombre como para mujer. En su taller, la investigación y prototipado son constantes. AyF Laboratorio es la forma de referirse a la experimentación con diseños que llevan al límite el patronaje o que introducen materiales ajenos a la zapatería como mallas metálicas, cuerdas o corchos que, en ocasiones, vienen de la arquitectura.

Si bien AldanodoyFdez evita encasillarse en el clasicismo, al mismo tiempo, rechaza un discurso acerca de la innovación que pretende reducir la creatividad exclusivamente a la ruptura. En ocasiones, lo que se busca con la experimentación es poner en valor los aspectos creativos de la adaptación o del mantenimiento mediante la máxima calidad. Otras veces, se trata de ejercicios que arriesgan.

Instagram ha resultado ser una poderosa herramienta para adaptar la artesanía a lo digital. Los vídeos cortos con primeros planos de manos cortando pieles o claveteando con pericia sobre las hormas han tenido gran repercusión. Instagram ha sido la mejor herramienta para comunicar la peculiar manera de trabajo manual del artesano.

Los comentarios que acompañan a las imágenes permiten contar el relato de la artesanía de un modo personal. Muchas veces, esto se ha hecho incorporando expresiones técnicas que generan respuestas de otros artesanos compartiendo impresiones e información.

El público general también ha resultado estar intrigado por conocer el proceso. Instagram permite, además, llevar la personalización a distancia hasta sus últimas consecuencias. La aplicación se puede utilizar, por ejemplo, para compartir en abierto el proceso de cada par con su comprador. A muchos clientes les gusta verse etiquetados en un vídeo donde lo que se está elaborando es su zapato.

DISEÑOS EN SERIE

Se abandona el trabajo por colecciones sucesivas que se sustituyen.

A partir de ese momento, los nuevos diseños se irán incorporando seriados añadiéndose a los que ya aparecen en la web, con vocación de permanecer durante años a la venta.

En la tienda online, se muestran en cuero natural, negro o una combinación de ambos. La ausencia de tinte en el cuero sin tratar da vida al zapato, que envejecerá de forma natural, cambiando el tono con el paso del tiempo y con el uso. En los bicolores con negro, es donde se aprecia especialmente el cuidadoso trabajo de patronaje. Luego, el comprador podrá personalizar cada modelo con tintados según sus preferencias. Las piezas se pintan a mano en el taller a gusto del cliente.

PRODUCIDO POR Y PARA HUMANOS

Para Aldanondo y Fdez el modelo de producción pausado de la artesanía y su forma de trabajo no seriado humanizan

A diferencia de lo estandarizado de la industria, el trabajo manual está abierto a la creatividad en cada momento del proceso. En su reverso, ese modelo de producción va acompañado de una forma de consumo responsable.

La artesanía de calidad es lo contrario a la moda rápida. La pieza está diseñada y construida para durar prácticamente toda la vida. Aldanondo y Fdez aspira a crear clásicos contemporáneos capaces de mantenerse en la tienda o el armario durante años. Se prendende así liberarse de las presiones de tendencias que pretenden que lo anterior se descarte todo el tiempo. El lujo se entiende aquí como la calidad honesta. Se evitan, por lo tanto, las estridencias de los logos y las imposiciones de la moda entendida como pura tendencia.

Conjugar el estilo con la comodidad es una de las obsesiones en Aldanondo y Fdez. La tradición del calzado artesano siempre ha priorizado la salud del pie. Desde el cuero que es tratado para favorecer la transpiración, hasta la forma ergonómica de las hormas adaptadas a cada pie. En el taller de Aldanondo y Fdez, la mayoría de los modelos son zapatos planos o con poco tacón que buscan la libertad y confort.

Los cambrillones en y griega acompañan al caminar mejorando la comodidad y la salud. La mayoría de los modelos son unisex ya que se entiende que gran parte de la segmentación por géneros va perdiendo sentido con el tiempo. Luego, detalles en los acabados son los que dan el toque personal a cada cual.

Se tiende a utilizar curtidos vegetales provenientes de proveedores cercanos y, cuando es posible, las materias son de origen kilómetro cero, como los curtidos de Igualada o Bañolas o el corcho de L’Empordà

RECONOCIMIENTOS

El reconocimiento por parte del público y de otros artesanos ha sido la recompensa más aprecida por Aldanonfo y Fdez.

En 2018, la Cofradía de Zapateros de San Marcos nombró cofrades a Ignacio y Catuxa en una ceremonia en la Catedral de Barcelna. Era el paso previo a lo que llegaría en 2019. Fue entonces cuando varias generaciones de maestros reunidos, de Josep Cunillera a Norman Vilalta, les otorgaron ese título.

Este gremio artesano de Barcelona es el más antiguo de toda Europa, como confirma una baldosa del año 1202 en el claustro de la Catedral. Catuxa y Krizia, otra zapatera que trabaja desde Barcelona, fueron nombradas las primeras maestras zapateras en la historia de dicho Gremio.

En los años 2019 y 2022, llegaron nuevos reconocimientos para Aldanonfo y Fdez, ya que se les otorgó el Premio Nacional de Artesanía en la categoría de emprendimiento en 2019, y un segundo Premio Nacional de Artesanía al Producto Artesano del Año se recibió en 2022.

APRENDIZAJE EN CADENA

Una vez adquiridos, los conocimientos y las habilidades e la artesanía se transmiten.

El artesanado no se entiende aquí como profesión individualista, sino a la manera que defiende Richad Senet. Es decir, como un tejido en reconstrucción que pone en el centro al homo faber el cual combina facetas de artesano, artista, diseñador y ejecutor.

El interés renovado por la artesanía de generaciones jóvenes es importante junto con la transmisión en cadena de los conocimientos y habilidades recibidas. Aldanondo y Fdez dedica parte del tiempo a la docencia ofreciendo formaciones diversas. Se organizan talleres de toma de contacto, aprendizajes técnicos o cursos sobre artesanía y zapatería.

También lo hace dando clases en escuelas de moda, diseño y artes aplicadas (IDEP, LCI); lecciones en másteres de artesanía como el de la Escuela Barreira Arte y Diseño; charlas en escuelas de negocio (Toulouse Bussines School) o talleres para empresas que buscan tomar contacto con la artesanía (Puig).

Sketch en acuarela